El sátrapa guineano
Lunes, 10 de Enero de 2011 11:14 , Pedro Gallardo
He tenido la ocasión de ver una video conferencia del profesor Arcadi Oliveras Boadella. Puede que no sea conocido en estas tierras norteñas de Sur, pero el presidente, de entre otras entidades, Justicia y Paz, transmite lucidez y transparencia desde años ha en que he tenido la ocasión de seguirle, desde su impulso a campañas solidarias con el Tercer Mundo en el tema del 0,7%, condonación de deuda por el colonialismo salvaje y mil más. Qué verdad, qué fondo en el dicho de que “el tercer mundo se muere de hambre, y el primero y el segundo, de colesterol”
He asentido por reflexión ante los argumentos de la crisis global dominante, ante los motivos para despertar de esta realidad que no sueño, ante las mentiras que los medios mediáticos afines lanzan permanentemente para “anestesiarnos”. En el fondo el origen y fin radican en controlar las plusvalías en poder de esa minoría del sagrado Capital, a costa de los fácilmente controlados, teniendo a su servicio un sistema y clase política sin capacidad de maniobra real, ante una Banca devoradora e inhumana, ante las necesidades de la mayoría.
He entresacado tres ejemplos, tres situaciones de su pedagógico y contestatario discurso: la situación hoy, de nuestra antigua colonia africana de Guinea Ecuatorial; los ahorrillos del “hermano del monarca hispano”, Hassan II a su liberación terrenal y, el negocio de la guerra y a la Paz y el equilibrio llenándome los bolsillos denunciando el papel que jugamos.
Todos sabemos de las riquezas petrolíferas de Guinea, de la dictadura de Obiang N’gema. Informes serios, nada wikiileados, del Senado norteamericano, reflejan las suculentas partidas depositadas en la Banca de Botín, de Don Emilio en su “Santander”. Ese poco más de medio millón de habitantes con renta per cápita anual de 500$, malvive en esas condiciones de explotación, mientras lo robado y dividendos, si fuere repartido, elevaría, multiplicando por 70, la riqueza personal, pasando a 35.000$ por ecuatoguineano, hoy expoliado, sumiso y los críticos opositores, al paredón. Las multinacionales petrolíferas también se llevan lo suyo, faltaría plus.
Y que decir del monarca alauita, del padre de nuestro primo real. Pues que a su despedida como mortal –y para colmo el Paraíso–, depósitos en la Banca parisina por valor de 50.000 millones de euracos, más o menos como el Bill Gates coetáneo de una década en atraso, ¿pecata minuta o un atraco?. Era el momento ya histórico en que Marruecos tenía que afrontar una deuda externa de 20.000 millones, de ahí que la mayoría tuviese que aguantar con el “pan, cebolla y té”, traspolado a este presente con directrices de nuestro incordiante “primo”.
Y que decir de nuestro fraude fiscal en banca suiza e islas caribeñas. No acabamos de meterle el diente, no se nos mosquee la clase oligarca nacional, pero eso si, a los que nos deben por tercermundistas, les damos uno a cambio de seis, estrangulando y asfixiando sus potencialidades de desarrollo. El precio presenta una de las mil caras, el trienio 2.006-2.008 con más de doce mil ahogados en el Estrecho o en Canarias, de los que se tiene fiel constancia.
FUENTE: http://www.elfarodigital.es/blogs/208-pedro-gallardo/32831-los-que-ocasionan-la-pobreza-tienen-nombre.html
Y España sigue en la cabecera, siendo hoy el sexto país mundial en venta y exportación de municiones, y no precisamente para practicar la puntería al ganso, la caza elitista y deporte de los prepotentes. El Sur, el subdesarrollo vende drogas al Norte y el Norte armas al Sur, en paradoja y amistosa relación. ¿Es descabellado, no atinado pensar que puede haber relación permisiva desde los estamentos oficiales en semejante panorama? Así se alimentan focos y fuegos de tensión, de guerra y opresión, sea el opio de Afganistán o la coca americana, el control energético o el espíritu del tío Sam y allegados a convenir.
Qua hay mucho delincuente en las alturas, que la pobreza tiene nombre, aunque la disfracen con mentiras, estructuras y coyunturas, controladas. Que hay quienes fabrican crisis para dominar y tener más, no teniendo nada de ingenuos.
¡Por qué ninguna lágrima rescata nunca el mundo que se pierde ni los sueños que se desvanecen!, poetizó Juana Ibarbourou y, yo me lo sigo preguntando, a veces lagrimeando, pero solo a veces.
En fin, que todo se ha de decir, que he disfrutado con Arcadi Oliveras, al que le deseo salud y rebeldía, ejerciendo su compromiso para con las más débiles. En otras, seguro nos encontraremos, estimado profesor, como en el reciente por joven antaño.