*La
figura de la “Parte Civil” en el juicio a Teodorín, ha sido decisiva…
*Parecía
imposible; pero Teodorín y su padre se lo han puesto fácil a Justicia
francesa
*La
corrupción -al igual que la mentira- tiene los pies muy cortos.
*LA
DROGA y su tráfico, la más eficaz “empresa “legal” de Teodorín…
*Teodorin,
sus múltiples hermanos, familiares y amigos, no son más que un leve eslabón de
la larga cadena de delincuentes creada por el primer eslabón: Teodoro
Obiang Nguema Mbasogo
(Crónica
de cercanía)
Por
Nkuá Elón. Periodista.
“PARTE
CIVIL”
He
estado presente, a título de observador, en algunas de las últimas sesiones del
largo e interminable proceso y juicio celebrado en el Correccional de París,
contra el hijo del dictador de Guinea Ecuatorial, Teodoro Nguema Obiang
Mangue, denunciado, acusado, juzgado y, finalmente, sentenciado por la Justicia
Francesa.
Difícilmente
hubiera asistido, yo, a las sesiones de juicio, previos al pronunciamiento de
la sentencia, del 27 de octubre de este año, 2017 si no me hubiera inscrito en
la lista de la llamada “PARTE CIVIL” que se definía como “presencia, en
representación, de ese pueblo de Guinea Ecuatorial, al que habían afectado y
afectan el robo, blanqueo, ejercicio de corrupción, malversación de
fondos y abuso de confianza y poder, cometidos por el hijo de Obiang Nguema.
Al
escuchar los delitos de los que se acusaba a Teodorín, todos ellos reforzados
por una profunda carga de pruebas documentales y avaladas por
declaraciones de testigos cualificados, comprendí que la “PARTE CIVIL” de la
que formaba parte… tenía un valor, si no jurídico o técnico, sí, vestía el juicio
de un profundo valor y fuerza humanos, al representar al PUEBLO GUINEO, víctima
final e impotente de los delitos de que se acusaba a Teodorín. El furibundo
enfado del régimen dictatorial y sus Abogados defensores, que, por toda
defensa, se emperraron en intentar evitar la presencia de la “PARTE CIVIL”
encarnada en la Asociación CORED, (de la que decían que convertía el proceso,
en “juicio político”). La PARTE CIVIL estuvimos ahí hasta el final; para
rabia y enfado desesperados del régimen.
Y,
al final, se pronunció la SENTENCIA. Escrita, así, en mayúsculas, para resaltar
el valor que la misma encarna y significa.
MAS
FACIL, IMPOSIBLE, PARA LA JUSTICIA…
Y
es que, mirado con toda la carga de serenidad y análisis que se merece, el
juicio en Francia a un acusado de robo al Estado, malversación de fondos,
blanqueo de capitales, corrupción, abuso de confianza y de poder; todo probado,
y llevado a cabo por el hijo de un DICTADOR africano, es una auténtica
innovación en las relaciones África-Europa. Tres eran los países apuntados, de
inicio, por TRANSPARENCY de Francia, en el asunto de Bienes Mal
Adquiridos: Gabón, Congo Brazzaville y Guinea Ecuatorial. No cabe duda de
que, puestos los tres países en el mismo disparadero de TRANSPARENCY France,
algo ha hecho Guinea Ecuatorial, su régimen, su Gobierno, su presidente, el
HIJO de este, para que Transparency de Francia estrenara con tanta eficacia un
proceso basado en los Bienes Mal Adquiridos. El régimen, evidentemente se lo
han puesto muy fácil a Francia y a su Justicia, al no tener ni el régimen ni
sus protagonistas ni sus abogados defensores más argumentos que evitar que el
juicio fuera político por la presencia entre los observadores, de Severo Moto y
CORED; o que la Justicia francesa no tenía jurisdicción para juzgar la
corrupción, la malversación, el blanqueo de dinero, el abuso de confianza y de
poder, practicados en territorio francés… (Porque nada de eso era delito en la
dictadura de Guinea Ecuatorial) Ningún argumento era capaz de probar que
Teodorín no estaba incurso en dichos delitos. Cualquier espectador, como yo,
sin ser ni testigo, ni Abogado ni Juez, ni casi nada más que PARTE CIVIL, se
hubiera dado cuenta, como yo, de que los abogados defensores “los hombres de
capa negra” lo tenían “muy negro” en sus argumentos de defensa. Más fácil no se
lo podían poner Teodorín y su padre a los acusadores, a la Juez y a la Justicia
francesa.
NO
HA FALTADO LA MENTIRA OFICIAL, “EQUATÓ”
No
ha faltado, en este juicio, ese elemento, tan tristemente común en el régimen
implantado en Guinea Ecuatorial, como es la MENTIRA. Escuchar a los
defensores de Nguema Obiang, empeñados tanto en centrar sus argumentos en
denunciar la presencia, en las sala, de la parte civil; y al Embajador de la
dictadura equató en Francia, Migue Oyon Ndong Mifum (OLOBOT) intoxicando los
pasillos y medios de comunicación con acusaciones, fuera de sitio, contra
Severo Moto; o trayendo como testigo a un inglés, consejero de Obiang
Nguema, llamado SIMON MANN, quien, acusado antes, de haber intentado
derrocar a Obiang Nguema en Zimbabwue, se ha convertido en un consejero,
muy bien pagado, del dictador equatorguineano; y que bajo la tortura en las
cárceles de Zimbabwue y en Black Beach de Guinea Ecuatorial, declaró lo que,
luego, en libertad, desmintió, bajo juramento en un “afidavit” ante la
Justicia inglesa. La MENTIRA, ese refugio pueril y desesperado en el que se
halla anclado el régimen de Obiang Nguema dejó pringado el ambiente general de
este juicio.
LA
DROGA, EL TESORO NACIONAL Y LA CORRUPCION; PRINCIPALES “EMPRESAS” DE TEODORIN
No
ha dejado de llamar la atención el empecinamiento de los defensores de Teodorín
en imitar y tomar la línea argumental de defensa, sugerida por el padre de
Teodorín y el Embajador de la dictadura, en Francia, al intentar blanquear los
robos y desmadres económicos de Teodorín, diciendo que todo se debe a sus
empresas privadas, ya desde antes de ocupar puestos de gobierno. Fue
impresionante, a la vez que casi traicionero, aquel recuento de empresas,
ganancias y centenares de miles de millones que uno de los Abogados defensores
de Teodorín presentó para probar la legitimidad y legalidad de su procedencia;
cifras que a la vez que parecían alabar a su defendido, más parecían demostrar
que era imposible que tanto dinero naciera de fuentes dignas, legítimas,
elegantes y limpias…
En
efecto, un mínimo buceo por entre las turbias aguas por las que se mueve el
vástago primogénito del dictador de Guinea Ecuatorial; una simple y breve
conversación (secreta) con alguien escapado del entorno de Teodorin, descubre
que el imperio económico del Vicepresidente del Gobierno de Obiang Nguema,
tiene hundidas sus profundas raíces en el BANGA; término de lengua fang,
traducido genéricamente al español como DROGA.
Sin
caer fácilmente en una denuncia o imputación vacía, basada solo en lo que
significa el consumo excesivo (de cuyas consecuencias se asegura que acaba de
ser desintoxicado el Vicepresidente de Guinea Ecuatorial en un país lusófono);
de lo que se trata es de algo tan vulgar y tan común en el régimen como el
trasiego, tráfico o negocio de DROGA, tan ejercido y “normal” en el mundo de la
dictadura de Guinea Ecuatorial, y en cuyas redes han caído, uno tras otro,
siempre tan sordos e irredentos, numerosos embajadores del régimen; con la
extraña suerte de que una vez pillados en las fronteras del mundo, son
rescatados por el “JEFE”, en las puertas de las cárceles y elevados
automáticamente a cargos de alto nivel gubernamental o institucional en Guinea
Ecuatorial.
Una
frase muy reveladora, esbozada, a voz en sorna, por nuestros confidentes que aseguran:
“Pocos
Vicepresidentes en el mundo, viajan tanto, extra oficialmente; con tantos
acompañantes y tantos maletines y carga; pertrechados y protegidos con tantos
pasaportes diplomáticos y de servicio, como el Vicepresidente de la República
de Guinea Ecuatorial, Don Teodorín Nguema Obiang Mangue”
Es,
por otra parte, de público conocimiento de todos, que la Tesorería General de
la República de Guinea Ecuatorial, es un auténtico POZO SIN FONDO, donde
pescan libre -a veces, violentamente- los hombres fuertes del régimen. Da,
efectivamente, la sensación de que el poder económico de Teodorín Nguema Obiang
Mangue no cace, ni tanto ni solo de sus empresas antes de sus altos cargos de
Gobierno, sino de otras fuentes donde solo la violencia, el delito y también el
poder pueden actuar.
Parece,
en este caso, que la más grande empresa de Teodorin, para manejar tanto dinero
y gastarlo en Francia, es la droga, la libre entrada en el pozo sin fondo de la
tesorería y la corrupción.
EL
JUICIO A TEODORIN: LA PEQUEÑA PUNTA DE UN INMENSO ICEBERG
Mi
crónica de cercanía no puede sino acabar con absoluta normalidad y coincidencia
con la opinión global, tanto de los medios de comunicación internacionales como
de los prohombres de Transparency Internacional de Francia. Este ha sido un
primer juicio sobre Bienes Mal Adquiridos, a la vez ejemplar y ejemplarizante;
ajeno a altas presiones fáciles, y un rotundo aviso a navegantes: “Francia
no puede seguir mirando a otra parte, viendo cómo desde África, los poderosos
ladrones vacían a sus pueblos pobres para enriquecer a sus colonizadores
ricos…”-Aseguraba el gran Abogado de Transparency Francia.
Y
en el caso concreto de Guinea Ecuatorial, el mensaje queda muy claro y
transparente: El juicio y condena de Teodorin, tiene relativa importancia en
cuanto se trata de la simple punta de un gigante iceberg
que debe ser pulverizado. TEODORIN Nguema Obiang Mangue, con sus
hermanos, parientes, amigos y colaboradores, son simples brotes y ramas
engordadas de un gran tronco: TEODORO Obiang Nguema Mbasogo, acorazado
en la impunidad, la inmunidad, la violencia, mientras dicta “sabias
orientaciones” a tantos otros “teodorines”.
COLOFÓN.
Tres
años de cárcel; 30 millones de Euros de multa, incautación de todo lo robado y
depositado por Teodorin, en Francia; incluido el suntuoso y polémico edificio
de la Avda. Foch de París.
Es
legítimo pensar que este ha sido el gran trofeo jurídico y el obsequio que,
recibido de manos de la Justicias Francesa, la PARTE CIVIL podemos ofrecer a
nuestro pueblo.
A la Juez del Correccional de París,
a los Abogados, al Gobierno francés les toca, a mi manera de pensar, marcar las
modalidades de la aplicación de la modélica, ejemplarizante e innovadora SENTENCIA
contra Teodorín.