El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, ha decidido descolgarse del viaje que una delegación parlamentaria encabezada por José Bono tiene previsto realizar esta semana a Guinea Ecuatorial, mientras que su homólogo de CiU y presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores, Josep Antoni Duran i Lleida, ha asegurado que participará de esa visita porque no tiene "más remedio".
Según informaron a Europa Press fuentes parlamentarias, Erkoreka ya ha comunicado a Bono que no se sumará a la visita porque tiene diversos asuntos que atender en Madrid tras haber estado de viaje de trabajo en Estados Unidos durante varios días.
El viaje está programado para los días del 9 al 12 de febrero y se prevé incluir en agenda un encuentro con el dictador ecuatoguineano, Teodoro Obiang, lo que ha suscitado los recelos de IU-ICV, ERC, UPyD y BNG, quienes cuestionan que el Congreso vaya a reunirse con un "tirano" al que la oposición 'plantó' hace cinco años cuando se pretendía que firmara en el Libro de Honor.
Hasta el momento sólo está confirmada la presencia en ese viaje del portavoz de los nacionalistas catalanes, quien, sin embargo, no parece muy entusiasmado a tenor del comentario que ha realizado en su página personal de Internet que recoge Europa Press: "El miércoles por la tarde viajaré a Guinea en una delegación oficial del Congreso encabezada por el presidente Bono. No tengo otro remedio que ir".
BONO DICE QUE ES UN ENCARGO DEL GOBIERNO
Por ello, el PP mantiene congelada su participación a la espera de que Asuntos Exteriores dé algún detalle más sobre el objetivo de ese viaje. En principio, se han dado de plazo hasta este martes, la víspera de la partida de la delegación.
Eso sí, el Grupo Popular ya ha expresado públicamente su descontento con la gestión de este tipo de viajes y reprochan al presidente del Congreso no haber consensuado con los grupos parlamentarios los objetivos y el alcance de la llamada diplomacia parlamentaria.
Desde el PSOE se han limitado a desmarcarse del viaje a Guinea subrayando que se trata de una iniciativa del presidente del Congreso y recordando que, en todo caso, la diplomacia parlamentaria no sustituye a la acción exterior del Gobierno.