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sábado, 1 de junio de 2024

¿Por qué escribo los artículos?

Por Armengol Engonga Ondo. Presidente del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial

 


Desde que asumí la responsabilidad de presidir el Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial, comprendí de inmediato mi paradigma de hacer oposición contra la absurda e inútil dictadura de la familia Obiang, encabezada por Teodoro Obiang Nguema Mbasogo. Esta dictadura ha retrasado a todo un pueblo desde el punto de vista cultural, social y económico durante más de 44 años de sufrimiento. La represión ha regado con sangre y sembrado de cadáveres inocentes los cementerios guineanos.

 


En mis artículos, intento reflejar y denunciar con un profundo sentimiento de indignación el horror que encontraremos tras el paso de esta clase política salvaje e irracional por la jefatura de la República. Han secuestrado el poder y nuestros derechos humanos más básicos, así como nuestra soberanía nacional.

 


Apostar por una democracia frente a un modelo autoritario y de terror tiene fundamentos sólidos desde diversas perspectivas: moral, social, política y económica.

 

La democracia respeta los derechos humanos, garantizando libertades fundamentales como la de expresión, prensa, reunión y religión, que son esenciales para la dignidad humana. Además, protege contra los abusos de poder mediante mecanismos de control y balance. En un sistema democrático, la soberanía reside en el pueblo, que elige y puede remover a sus representantes mediante elecciones libres y justas. Esto asegura que las decisiones políticas reflejen una amplia gama de intereses y necesidades, permitiendo la participación de diversos grupos sociales y minorías.

 


La transparencia y la rendición de cuentas son pilares de la democracia. Las instituciones independientes supervisan el actuar del gobierno, promoviendo la transparencia y asegurando que los líderes sean responsables a través de mecanismos legales y electorales. Las democracias también tienden a mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos, con mejores accesos a servicios básicos como salud y educación, y menores índices de pobreza. La libertad de pensamiento y expresión fomenta la innovación y el progreso científico y cultural.

 


Desde el punto de vista de la paz y la estabilidad, las democracias tienen mecanismos para la resolución pacífica de conflictos internos, lo que reduce la probabilidad de guerras civiles y violencia política. Además, los cambios de gobierno se realizan de manera pacífica y ordenada, contribuyendo a la estabilidad política y social. Los gobiernos democráticos obtienen su legitimidad a través del consentimiento de los gobernados, expresado en elecciones libres y transparentes, generando mayor confianza en las instituciones y en el sistema político en general.

 


Económicamente, las democracias fomentan el estado de derecho y la protección de los derechos de propiedad, creando un entorno favorable para la inversión y el crecimiento económico. También suelen enfocarse en la equidad y la redistribución, reduciendo la desigualdad económica. Las democracias tienen la capacidad de reformarse y adaptarse a las nuevas demandas y desafíos sociales, económicos y tecnológicos, lo que las hace más resilientes a largo plazo. Permiten la experimentación y la implementación de nuevas políticas de manera flexible y receptiva a las necesidades de la población.

 


En contraste, los modelos autoritarios y de terror, como estamos acostumbrados en Guinea Ecuatorial, se caracterizan por la represión, la violación sistemática de los derechos humanos, la falta de transparencia, la corrupción y la concentración del poder en manos de unos pocos. Esto a largo plazo conduce a la inestabilidad y al estancamiento social y económico. Por estas razones, la democracia se presenta como un sistema mucho más deseable y efectivo para el bienestar integral de la sociedad.

 


Simultáneamente, quiero aportar soluciones para la etapa post-Obiang, la transición a la democracia, ideas que funcionan y que mejoran las sociedades que las aplican.

 


Junto con mi equipo en el Partido del Progreso, hemos elaborado medidas para enfrentar las carencias que actualmente adolece nuestro pueblo. Estas medidas incluyen:

 

Transición política: Propuestas para una transición democrática que garantice elecciones libres y transparentes, y el establecimiento de instituciones sólidas y democráticas.

Desarrollo socioeconómico y cultural: Planes para revitalizar la economía y promover el desarrollo cultural y educativo del país, asegurando oportunidades equitativas para todos los ciudadanos.

Justicia y reconciliación: Estrategias para llevar a cabo un proceso de justicia transicional que permita juzgar los crímenes del régimen y promover la reconciliación nacional.

Concordia y convivencia pacífica: Iniciativas para fomentar la paz y la convivencia entre todos los guineanos, superando divisiones étnicas y políticas.

 


Estas propuestas representan el pensamiento y debates dentro del Partido del Progreso y es para nosotros una verdadera alternativa política para el futuro de Guinea Ecuatorial. Mi objetivo es que, a través de estos artículos, no solo se denuncien las atrocidades del régimen actual, sino que también se presenten las bases para construir un país más justo, próspero y libre. Para conseguirlo, tenemos que unirnos todos y pensar de manera patriótica. Hay que hacerlo por Guinea Ecuatorial y, sobre todo, por nuestros hijos y las futuras generaciones.