Por Armengol Engonga Ondo. Presidente del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial
De todos los temas que he abordado hasta ahora, ya sea sanidad, educación, comercio, agricultura, industria, desarrollo económico, desarrollo de los pueblos, desarrollo socioeconómico y cultural, o el marco de convivencia social, considero que el desafío más grande que enfrenta nuestro pueblo es la transición política en Guinea Ecuatorial. Este artículo pretende resaltar la importancia y la necesidad urgente de esta transición política para nuestro país. Sin embargo, no nos engañemos: nada de esto será posible si persisten las barreras que impiden el progreso de la sociedad.
Hemos sostenido repetidamente
que, para alcanzar un principio de acuerdo, deben tomarse algunos pasos
sencillos y obvios en la dirección correcta. Consideremos los siguientes
puntos:
Primero, no hay posibilidad de
diálogo mientras existan presos de conciencia, disidentes u opositores
políticos encarcelados. Si aspiramos a un cambio hacia la democracia, ningún
opositor debe permanecer en las cárceles del régimen. Esto es innegociable.
Todos los presos políticos deben ser liberados.
Segundo, no entablaremos
negociaciones con miembros del régimen que busquen usar el diálogo como una
distracción para prolongar la dictadura. No negociamos con corruptos ni
violentos.
Tercero, se debe garantizar el regreso
seguro de todos los exiliados que deseen volver a sus hogares en Guinea
Ecuatorial. El retorno debe cumplir con todas las garantías necesarias. Los
exiliados deben saber que no serán perseguidos ni hostigados.
Finalmente, debemos disponer de
las herramientas necesarias y asegurar todo el proceso de transición hacia la
democracia. Las formaciones políticas, las asociaciones cívicas y todos los
actores sociales deben tener garantías y facilidades para llevar a cabo su
misión, que no es otra que lograr una democracia plena que refleje la
voluntad del pueblo de Guinea Ecuatorial.
Un Cambio Necesario
La transición política en Guinea
Ecuatorial representa la auténtica oportunidad de cambio. Será la prueba de
fuego que demostrará que el dictador Teodoro Obiang, su extensa familia
chupóptera y su círculo selecto de aduladores sanguinarios y corruptos, han
abandonado el poder, las pistolas, los coches oficiales y el autoritarismo. Es
el momento de dejar atrás la corrupción y el abuso del poder que han
caracterizado a su régimen.
Un Punto y Aparte en Nuestra
Historia
La transición política será un
punto y aparte en nuestra historia. Dejará atrás un período oscuro, sangriento
y tremendamente corrupto, donde un grupo de desalmados se apoderó de nuestra
nación, secuestrando nuestra soberanía nacional, nuestro espacio común y todos
nuestros recursos naturales, que pertenecen a todos los guineanos: hombres,
mujeres, mayores, jóvenes y futuras generaciones.
Un Cambio de Vida
La transición política supondrá
un cambio radical en nuestras vidas. Será el fin de 45 años de dictadura bajo los
Obiang, un período marcado por la barbarie. Nos permitirá encarar el futuro con
entusiasmo, con un sentimiento de alivio y liberación, y con la esperanza
fundada de un futuro mejor para nuestro pueblo.
El Inicio de la Transición
La transición política en Guinea
Ecuatorial comenzará, por supuesto, al día siguiente del abandono del poder por
parte de Teodoro Obiang Nguema, su Gobierno y su régimen abyecto. Tras su
salida, se pondrá en marcha de inmediato el retorno en libertad de todos los
líderes políticos y de la sociedad civil exiliados en España, Francia, Reino
Unido, Portugal, Bruselas, EE.UU., Gabón, Camerún, Nigeria, entre otros países.
Su participación será crucial para guiar la tan demandada transición política.
La Responsabilidad de Todos
En mi opinión, si todos los
guineanos de bien arrimamos el hombro y asumimos nuestras responsabilidades,
habremos sentado una buena base para el futuro. Estaremos construyendo entre
todos un sólido edificio para el futuro democrático, el estado de derecho y el
desarrollo socioeconómico. Un futuro en el que el bien común y el interés
general de todos los guineanos sean siempre la prioridad.
Construyendo un Futuro
Democrático
Para que la transición política
sea efectiva, es vital establecer un marco legal robusto que garantice la
transparencia y la justicia. Esto incluye la creación de instituciones fuertes
e independientes, como un poder judicial imparcial, un sistema electoral
transparente y una prensa libre que pueda actuar sin censura ni represalias.
Solo a través de estas medidas se podrá asegurar que el nuevo sistema político
sea verdaderamente democrático y representativo de los intereses de todos los
ciudadanos.
El Papel de la Comunidad
Internacional
La comunidad internacional
también juega un papel crucial en este proceso. El apoyo de organizaciones
internacionales, como la ONU, la Unión Africana y la Unión Europea, será
esencial para monitorear y garantizar que la transición se lleve a cabo de manera
justa y pacífica. Además, la colaboración con países que han experimentado
transiciones exitosas puede proporcionar valiosas lecciones y modelos a seguir.
La Voz del Pueblo
Es fundamental que la voz del
pueblo guineano sea escuchada y respetada durante todo el proceso de
transición. Esto implica la organización de elecciones libres y justas, donde
todos los ciudadanos tengan la oportunidad de elegir a sus representantes sin
miedo a la intimidación o el fraude. La participación ciudadana es el corazón
de cualquier democracia, y en Guinea Ecuatorial no debe ser diferente.
Educación y Conciencia Cívica
Para sustentar una democracia
duradera, es imprescindible invertir en la educación y la conciencia cívica de
la población. Programas educativos que fomenten el entendimiento de los
derechos y deberes ciudadanos, así como la importancia de la participación
política, son fundamentales para crear una sociedad informada y activa. Una
población educada es la mejor defensa contra futuros intentos de autoritarismo.
Una Llamada a la Unidad
La transición política requiere
la unidad de todos los sectores de la sociedad guineana. Es un llamado a dejar
de lado las diferencias y trabajar juntos por un objetivo común: un Guinea
Ecuatorial libre, democrática y próspera. Cada ciudadano tiene un papel que
desempeñar, y es solo a través de la colaboración y la solidaridad que podremos
construir un futuro mejor para nuestro país.
Mi reflexión ante lo que nos
espera
La transición política es
imprescindible para Guinea Ecuatorial. Es la única vía para liberarnos de
décadas de opresión y corrupción, y para construir un futuro en el que todos
los guineanos puedan vivir en libertad y prosperidad. La tarea no será fácil,
pero con determinación y unidad, podemos lograr un cambio significativo y
duradero. El futuro de Guinea Ecuatorial depende de nuestra capacidad para
enfrentar este desafío con valentía y responsabilidad.