Por Armengol Engonga Ondo. Presidente del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial
Compatriotas, hermanos y hermanas de Guinea
Ecuatorial,
Nuestra lucha por la libertad, la justicia y la democracia ha sido larga, llena de sacrificios y marcada por el sufrimiento de un pueblo que nunca se ha rendido. Hoy, el régimen de Teodoro Obiang y su clan corrupto está más acorralado que nunca. La comunidad internacional, los organismos de derechos humanos y hasta sus antiguos aliados empiezan a tomar distancia de una dictadura que se ha vuelto insostenible, no solo por su brutalidad, sino también por su ineficacia y la corrupción desmedida que ha convertido a Guinea Ecuatorial en un país empobrecido y sin futuro.
El pueblo guineano nos pregunta con razón: ¿Cómo
saldremos de esta? ¿Cómo reconstruiremos un país destruido desde sus cimientos?
La respuesta es clara: con unidad, justicia
y un proyecto democrático sólido.
La Memoria Histórica: El Fin de la
Impunidad
No olvidamos, y no permitiremos que nadie
olvide. En nuestra memoria colectiva están grabados los crímenes de este
régimen. Las torturas, las desapariciones, los encarcelamientos arbitrarios, el
saqueo descarado de nuestras riquezas y la humillación constante de nuestro
pueblo. Cada joven asesinado, cada familia destrozada, cada voz silenciada es
un recordatorio de por qué luchamos.
Por ello, en el post-Obiang, el Partido del
Progreso de Guinea Ecuatorial impulsará la creación de una Comisión de la
Verdad, la Justicia y la Reconciliación. No buscamos venganza, pero sí
justicia. Es fundamental documentar cada abuso, dar voz a las víctimas y sentar
las bases para que nunca más se repita esta tragedia en nuestro país. El modelo
sudafricano de transición, liderado por Mandela, nos enseñó que solo a través
de la verdad podemos construir una reconciliación genuina y duradera.
Reconstrucción Nacional: Un Nuevo
Comienzo para Guinea Ecuatorial
La dictadura nos deja un país devastado, como
si hubiésemos salido de una guerra. El tejido social está roto, la economía es
un caos dominado por unos pocos, la cultura ha sido silenciada y políticamente,
hemos vivido en un estado de terror constante. Sin embargo, nuestro pueblo
es resiliente y tiene la capacidad de levantarse.
La democracia no solo traerá libertad, sino
que también será la llave para el desarrollo y la estabilidad. La igualdad ante
la ley, el respeto a los derechos humanos y la implementación de un sistema
transparente de gobernanza permitirán que todos los guineanos, sin excepción,
tengan oportunidades reales de prosperar. Pondremos fin al nepotismo y a la
corrupción que han condenado a nuestro país a la miseria.
Hago un llamamiento a la Unidad y a la
Esperanza
Compañeros, el fin del régimen de Obiang está
más cerca que nunca. No caigamos en el desánimo ni en la desesperación. El
cambio es inevitable, y lo construiremos juntos.
Cada uno de nosotros, ya sea dentro o fuera
del país, tiene un papel en esta transformación. Mantengamos la presión,
sigamos denunciando, organizándonos y preparando el camino para la transición
democrática. La dictadura de los Obiang será un mal sueño que superaremos
con esfuerzo, determinación y fe en nuestro futuro.
La Guinea Ecuatorial que queremos será un país
de todos, donde el Estado de derecho garantice justicia, igualdad y
oportunidades. El momento de la verdad ha llegado. Guinea Ecuatorial será
libre. ¡Y lo será pronto!