Por Armengol Engonga Ondo. Presidente del Partido del
Progreso de Guinea Ecuatorial
He de manifestar mi alegría y reconocer que hay interés general por que las cosas cambien en Guinea Ecuatorial. Me satisface sentir el deseo de la población por alcanzar una normalidad social y política que nos iguale con otros países más desarrollados.
La democracia, si lo hacemos bien
y yo creo que así será, facilitará un ambiente de contribuciones y compromisos
colectivos que hoy son sencillamente imposibles. Los que sepan de cultura
impulsaran las artes y las ciencias y los que entiendan de obras públicas,
lucharan por mejorar y construir nuevas infraestructuras en beneficio del
pueblo. En todos los sectores se abrirán oportunidades que hoy no existen. La
democracia debe facilitar el intercambio de ideas, las distintas opciones para
solucionar problemas y el ambiente general que permita todo esto.
Nuestro objetivo es hacer fácil
la vida de todos y permitir que los diferentes proyectos puedan ver la luz lo
antes posible. Debemos esforzarnos por crear un escenario donde nadie tenga más
derechos sobre otros y que la violencia quede desterrada y anulada como
argumento político.
Las Fuerzas de Seguridad, el
Ejército y los funcionarios públicos han de trabajar para mantener la
neutralidad que les exige este momento histórico. Las formaciones políticas
hemos de esforzarnos por ofrecer a los guineanos herramientas para que se expresen
y puedan indicar nítidamente cómo quieren que sea el Gobierno del país. Este es
un camino delicado con muchas fases y hemos de salvarlas todas si queremos
llegar al final.
Algunos ya se postulan como
candidatos a gobernar Guinea Ecuatorial aún sin haberse convocado unas
elecciones. Son como aspirantes a un concurso de belleza por la profusión de
fotos y argumentos en busca de admiradores.
Cuando me preguntan a mí si seré
el candidato del Partido del Progreso les digo muy claro que esa es la última
fase de esta larga travesía y no me corresponde a mí decidirlo. Mi única
responsabilidad en estos momentos es la de llevar a mi partido político a
Guinea Ecuatorial. Luego tenemos que celebrar un gran Congreso en nuestro país
que permita escuchar todas las propuestas. Habrá que elegir los cargos del
Partido del Progreso y toda su estructura. Y solo, cuando se convoquen
elecciones tendremos que elegir a los distintos candidatos. Esto tiene que estar
muy claro. No se elige uno mismo sino el que quieren los militantes del
partido.
Hay personas que se creen con el
poder de postularse a la presidencia de la república como si valiese más su
deseo que la realidad de someterse a unas elecciones.
Vamos a ver de todo en estos
tiempos de cierta confusión. Por eso, es muy importante que se constituya
cuanto antes la mesa de partidos y negociemos las normas, la hoja de ruta que
ha de servirnos de guía hasta que todos vayamos a votar por nuestro futuro.
Está en nuestras manos. En el
Partido del Progreso estamos por hacer posible que tras Obiang se abra paso la
democracia. Estamos luchando por ello y haciendo grandes esfuerzos. Queremos
que los futuros ciudadanos vean en nuestra formación política una buena oportunidad
para mejorar el futuro.
Es la hora de luchar por la
democracia y las elecciones libres, luego hablaremos de los candidatos.