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domingo, 25 de abril de 2021

UNA DEMOCRACIA PARTICIPATIVA PARA GUINEA ECUATORIAL (I)


Redacción El Confidencial 


La democracia participativa se puede definir como un modelo político que facilita a los ciudadanos su capacidad de asociarse y organizarse de tal modo que puedan ejercer una influencia directa en las decisiones públicas. Aunque en los momentos actuales parece que las sociedades democráticas tradicionales van acusando un cierto cansancio y bastante apatía a la hora de participar en la vida pública. Hay que reconocer, no obstante, que la participación de los ciudadanos es mas intensa cuando existe un buen grado de gobernanza en sus países y los respectivos gobiernos gozan de un alto grado de credibilidad.

Hay un hecho que debemos destacar y que nos llama poderosamente la atención, y es el alto grado de participación de los guineanos fuera del país (la oposición exiliada) en su lucha contra la voraz dictadura de Teodoro Obiang Nguema. Este fenómeno de participación activa ciudadana, estando diseminados por todo el mundo, como es nuestro caso,  no se ha dado de esta forma en los países que a finales del siglo XX accedieron de la dictadura a la democracia. No se dio tan acusadamente en España, ni en Iberoamérica (Chile, Argentina...) ni por supuesto en los países del Este. En estos casos los partido políticos, casi en exclusiva, fueron los que dirigieron el proceso, con escasa participación de la sociedad civil.

Las razones que explican este fenómeno se encuentran en el deseo y la voluntad férrea del pueblo guineano en comenzar una nueva etapa histórica, después del larguísimo periodo de dictaduras que han desangrado a la sociedad guineana. Es importante advertir que la participación y el compromiso personal con la democracia son y serán (en nuestro país) un eficaz instrumento para la construcción de una sociedad democrática y plural, donde los derechos y deberes de los ciudadanos encuentren su más pleno y completo desarrollo.

No obstante,  en una democracia participativa, las elecciones libres  pueden y deben ayudar a poner en marcha planteamientos innovadores en donde los actores deben asumir protagonismo con una visión territorial propia y unos objetivos integradores y globales, que hagan posible  la construcción y el fortalecimiento de la sociedad civil.

En el Partido del Progreso siempre hemos defendido estos postulados, convencidos de que son capaces de suscitar actuaciones para el  desarrollo de la capacidad local de cooperación, de la cooperación entre los sectores público y privado, el fomento de la innovación y la mejora de la gobernanza local. Este planeamiento nace del convencimiento de que Guinea Ecuatorial se merece una democracia homologable a la de los países occidentales desarrollados y muy por encima de las democracias que conocemos en muchos  países del continente africano.  

Estamos convencidos de que la metodología de participación puede crear un medio de participación antes inexistente, ayudar  a crear en la comunidad de Guinea Ecuatorial, y en la comunidad internacional, una cultura de iniciativas propias, ampliando las oportunidades para los ciudadanos, hombres y mujeres, potenciando la apreciación internacional de una nueva Guinea Ecuatorial unida, y revalorizando una gran parte del patrimonio natural, cultural, y social. 

Así, la participación de la sociedad civil se presenta como un referente constante, como fin determinante en los objetivos programáticos, para alcanzar en Guinea Ecuatorial, en los próximos años, un asentamiento de las bases para una democracia participativa y en libertad donde la cohesión económica, social y territorial sea una prioridad de primer orden.  

Los países de larga tradición democrática tienen una sociedad activa, participativa en todas las instancias que tienen que ver con los derechos, obligaciones sociales o lo que es lo mismo con sus libertades individuales y colectivas.

La sociedad civil agrupa, en particular, a las organizaciones sindicales y patronales (los "interlocutores sociales"), así como a las organizaciones no gubernamentales-ONG- y a otras asociaciones de diverso índole, expresión de las diversas realidades de la sociedad civil, organizaciones todas ellas para la participación de los ciudadanos en la vida pública  y en particular a nivel  local y municipal.

Un porcentaje amplio de la población debe participar como miembro activo de algunas de las múltiples asociaciones profesionales sociales: empresariales, sindicales, políticas…, que desempeñan un importante papel al permitir a los ciudadanos expresar sus preocupaciones y prestar servicios que respondan a sus necesidades. 

Este empeño, esta hoja de ruta sirve a menudo como  sistema de alerta rápida para orientar el debate político.

En las asociaciones sociales de base, es habitual  los debates relativos a distintas hipótesis alternativas, lo cual demuestra una madurez democrática envidiable, en un ámbito donde se aprende el universalismo, el logro, la racionalidad, la tolerancia o el pluralismo, a respetar lo diverso, quizás alejado de los puntos iniciales, y esto es más admirable cuando son grupos que se asocian en torno a principios y valores esenciales.

La sensibilidad  creciente de las instituciones internacionales por la opinión pública de los  ciudadanos, se advierte en la orientación de las diferentes acciones que se proponen y trabajan; todo ello, con el transcurso del tiempo, tiene una transcendencia directa  para la sociedad.

Este debate es de gran interés pues nos encontramos ante la posibilidad de la celebración de unas elecciones libres y democráticas en Guinea Ecuatorial. Nos podemos encontrar en un escenario internacional, político, económico, y social,  que espera esta capacidad de reacción de los hombres y mujeres guineanos. Es el momento de debatir asuntos nacionales desde la perspectiva del ejercicio de libertades, el bien común y la expresión más genuina de todo aquello que precisa el desarrollo y el bienestar de nuestro pueblo. En este sentido se enmarcan las propuestas sobre descentralización, simplificación y transparencia; su sensibilidad por las minorías, las políticas de igualdad o los grupos marginales. Orientaciones que deben llegarnos con nitidez, pues pone de manifiesto un diverso impulso respecto a la gobernanza por el que ha apostado el Partido del Progreso. Ya no se puede ignorar el esfuerzo realizado durante años. El clamor social e internacional expresa la necesidad del cambio, siempre sustentado en los valores de paz y reconciliación, de libertad y respeto a la dignidad de la persona. 


Continuará....