Ataviado con un sombrero chino y una guayabera a lo “Mao Tsé Tung”, un tembloroso Obiang Nguema, arremete, desde su escondite, en su “Televisión Internacional”, contra España.
Comentario de Severo-Matías MOTO NSA, Presidente del Partido
del Progreso y Gobierno en el exilio de Guinea Ecuatorial.
del Progreso y Gobierno en el exilio de Guinea Ecuatorial.
Desde los más iniciales días del Gobierno del Partido Popular, bajo la égida del Presidente Don Mariano Rajoy Brey, descansa en su despacho un documento por el que la oposición guineana, exiliada en España, propone al nuevo Gobierno español, ABOLIR -si todavía no lo está- la famosa LEY DE MATERIA RESERRVADA que desde los años finales de Don Francisco Franco Bahamonde (1968) pesa sobre Guinea Ecuatorial.
Al margen de ser un impresentable y vergonzoso modo de tener relegada a la sociedad guineana en un escondrijo inmundo y despectivo, fuera del conocimiento de su triste realidad social, política y económica; esta Ley sirve fundamentalmente para:
1.- Ocultar todos los desmanes, desafueros, delitos y abusos que los extranjeros -colonos o no- perpetran y prodigan en Guinea Ecuatorial; y que los medios de comunicación extranjeros (España incluida) han procurado obviar para “no perjudicar los intereses de los españoles en Guinea Ecuatorial”
2.- La dictadura-antes, de Macías Nguema, ahora de Obiang Nguema- ha disfrutado inmensamente de esta LEY DE MATERIA RESERVADA, bajo cuya cobertura silenciosa y silenciadora, y durante más de 43 años, se han producido asesinatos, robos, y toda clase de desmadres, no solo contra los guineanos y sus bienes; sino también contra los de los extranjeros. Y en esa conjunción pecaminosa de intereses espurios, no solo se ha ocultado la realidad trágica de la vida del pueblo guineano, bajo las dictaduras de Obiang Nguema y Macías Nguema, sino que, durante todo ese tiempo, cuando se ha intentado abrir la sucia mortaja de la LAY DE MATERIA RESERVADA que pesa sobre nuestro país, los grandes protectores del régimen dictatorial de Obiang Nguema se han apresurado a gritar a los cuatro vientos: “En Guinea Ecuatorial se constatan, ya, signos de avances democráticos...” En alabanzas a un sanguinario dictador que gana, a latigazo limpio de terror, todas las “elecciones”, por un 99% acompañado de un único diputado –dicen de oposición- incrustado entre los 99 diputados del eterno ganador de las elecciones; y que, por pura obviedad, se acaba de convertir en presidente y candidato vitalicio de Guinea Ecuatorial. Los últimos ocho años han sido verdaderamente vergonzosos, a la vez que letales, en ese sentido, para el siempre despreciado pueblo de Guinea Ecuatorial.
La mentira, la falsedad, el ocultismo y el disimulo, han servido al taimado dictador Obiang Nguema para valerse de la Ley colonial de la MATERIA RESERVADA y protegerse bajo ella.
La prueba del “algodón”, la del “nueve” y todas las pruebas contundentes y paradigmáticas se han concentrado en el amplio Reportaje (dos páginas) y un Editorial, del periódico, “EL PAIS” (Domingo, 29 y lunes, 30, respectivamente) aventando el pútrido tufo de SOLO UNO de los inmensos delitos de lesa patria que viene cometiendo el cruel dictador Obiang Nguema Mbasogo: EL ROBO, en todas sus facetas: Latrocinio, Rapiña, Fraude y Estafa, con violencia incluida.
Y eso que todavía queda por levantar la ley de “MATERIA RESERVADA” que acalla, silencia y tapa los feroces asesinatos que Obiang Nguema desarrolla en el país para ofrecer sacrificios a los marabúes para eternizarse en el poder. Aún queda por revelar las conexiones delictivas del tráfico de droga con el que Obiang Nguema Mbasogo ha convertido a nuestro país en un infesto almacén internacional de droga. Y el tráfico y venta de armas…
La CIA, el FBI y otros perseguidores de delitos internacionales tienen todavía mucho que decir; y los periódicos y otros medios de comunicación tienen todavía muchas veces que levantar la “MATERIA RESERVADA”, como lo acaba de empezar “EL PAIS”.
Y, Obiang Nguema Mbasogo & Company tienen todavía mucha televisión internacional que utilizar para arremeter contra España.